Johan Giraldo, una obra para repensar la realidad desde la ficción del cómic

La exposición Action Comics: pinturas y dibujos de Johan Giraldo, que recoge gran parte de la obra del artista se podrá ver en El Coleccionista Galería (Cra 45 # 25 – 15 en Barrio Colombia) hasta el 23 de marzo.

Imagine por un momento al cacique de La Junta, Diomedes Díaz, cortejando a la Mujer Maravilla, y dedicándole algunos de sus versos: que tus ojos me dominan, que tu boca me fascina, que tu cuerpo me enloquece. Qué hubiera sido de ella, de sus poderes y sus misiones, qué hubiera sido de él. O de Superman, si se hubiera tenido que medir en un duelo contra Pablo Escobar o Tirofijo, o de la toma del Palacio de Justicia, si la liga de la justicia con todos sus superhéroes hubieran llegado a intervenir.

Todo eso tan inverosímil se vuelve posible en la obra de Johan Giraldo, donde los superhéroes de los cómics se encuentran con los protagonistas de la historia nacional. La serie, denominada Inmarcesible Stories, es un trabajo que Johan empezó hace casi 10 años, cuando todavía estaba en la universidad, pero que empezó a gestarse muchos años atrás.

Johan dice que su interés por el dibujo empezó más o menos a los 5 años, cuando empezó a dibujar lo que veía en televisión, y luego lo que veía a su alrededor y fue tomando sentido cuando empezó a caricaturizar las figuras de autoridad que lo rodeaban. Pero el mismo interés que Johan tenía por el dibujo lo tenía por la historia, porque era la forma que había encontrado de entender su realidad.

“Mi padre ha sido camionero por cerca de 40 años. Se ha recorrido el país y ha tenido que lidiar con situaciones bastante intimidantes. Sus viajes de trabajo eran una zozobra para la familia. Cuando volvía era como un milagro: sobrevivió. Esa incertidumbre y esa realidad nos obligó a mis hermanos y a mí a buscar entender por qué pasaba eso, porque que las guerrillas, los grupos armados, sus orígenes, sus motivaciones, pero a diferencia de mis hermanos a mí se me volvió como una obsesión”, dice Johan.

Pero fue cuando estaba estudiando artes en la Universidad Nacional, que esa obsesión por la historia se articuló con su interés por el dibujo. “Empecé a investigar las formas de narrar la historia, cómo las producciones de cine y televisión estaban convirtiendo la historia y la realidad social nuestra en una especie de producto de consumo para la industria del entretenimiento”, dice Johan.

En ese ejercicio Johan veía series y películas y lo comparaba con los archivos de prensa y de memoria histórica, con libros de historia. Buscaba por donde se hacían los baches, como la realidad se hacía ficción, y esa ficción con el tiempo se volvía realidad, y como esa realidad terminaba configurando una identidad nacional a partir de como percibimos que nos ven. En medio de la investigación fue que entendió que el cómic sería su lenguaje artístico.

 

“El cómic me pareció súper propicio. Me permite jugar con la literalidad y la ambigüedad de las cosas. Es visualmente súper atractivo, las imágenes se resuelven a partir de colores vibrantes, contorneados por líneas negras, lo que hace que la imagen sea muy directa, pero a la vez uno puede jugársela con diferentes niveles de lectura, hay mensajes evidentes y otros encriptados. Además, a lo largo de su historia, el cómic norteamericano ha abordado distintos problemas sociales y políticos, la Gran Depresión, la Segunda Guerra Mundial…”, dice Johan.

Además le permite proponer a los espectadores un juego: imaginar lo imposible. Y en un mundo donde ya no basta con ver para creer, es necesario imaginar, que la ficción haga posibles otros escenarios y otras preguntas que permitan construir nuevos relatos. Así como los gringos se han pintado como héroes, pintarnos nosotros también de alguna manera y pensarnos desde ahí. Eso es lo poderoso en la obra de Johan, que nos permite volver a ver y vernos.

“Su táctica conecta a un público masivo que se identifica con la técnica y que al acercarse para ver con mayor detenimiento el trabajo se encuentra con una postura crítica, irónica, de ácido humor negro sobre la realidad nacional. Lo que de lejos se ve inofensivo, o en algunos casos ingenuo, de cerca detona el extrañamiento, problematiza la circunstancia”, escribió Carlos Uribe, el curador de la más reciente exposición de Johan Giraldo, denominada Action Comics: pinturas y dibujos, que reúne gran parte de la serie Inmarcesible Stories y que estará abierta en El Coleccionista Galería hasta el 23 de marzo.

Si quiere saber más de la exposición en El Coleccionista Galería, entre aquí. Si quiere saber más de Johan y su obra, es por acá.

SARA KAPKIN

Fuente: Artículo de internet. Johan Giraldo, una obra para repensar la realidad desde la ficción del cómic. El Colombiano.